Breve historia de Elon Musk

Elon Musk nació en Sudáfrica en 1971, desde su niñez deseaba estudiar en Estados Unidos, tan solo a sus 10 años ya era capaz de programar su computadora e incluso llego a crear un par de años más tarde videojuego llamado Blastar que vendió a una revista por USD500 y que en 1984 publicaría el código fuente recomendando su lectura por la excelente optimización del uso de recursos. El dinero que ganaba programando lo gastaba en cómics, computadoras y juegos de rol como Dungeons and Dragons.

A los 17 años se mudó a Canadá para estudiar física y economía en Queen’s University de Ontario. En 1992 Elon obtuvo una beca para estudiar Economía y Física en la Universidad de Pensilvania. Recibió sus títulos de Economía y Física del Wharton School en la Universidad de Pensilvania. Después se matriculó en Stanford para hacer el doctorado pero a los dos días lo abandonó para iniciar su propia empresa.​ En 1995 tuvo la intención de trabajar para Netscape y fue a sus oficinas, pero no se atrevió a hablar con nadie por timidez.

Uno de sus profesores en la Universidad de Pensilvania era director ejecutivo de una empresa en Los Gatos, Silicon Valley, dedicada a investigar ultracondensadores electrolíticos destinados a vehículos eléctricos. Elon Musk trabajó un verano en la empresa Pinnacle Research. Esos ultracondensadores tenían una densidad energética muy alta, pero sus componentes químicos eran carísimos y se vendían por miligramos porque había muy pocas minas que los extrajeran. No eran escalables para su producción en masa.

Tras obtener sus licenciaturas, e inspirado por innovadores como Nikola Tesla,​ Musk decidió entrar en tres áreas en las que consideraba había «problemas importantes», como luego indicaría él mismo: «Una de ellas era internet, otra la energía renovable y la otra era el espacio»

Elon Musk, el visionario

Después de que decidiera dejar Stanford, Musk fundó su primera empresa con su hermano en el año 1995, su nombre fue Zip2 y consistía en una «guía de la ciudad» por Internet, misma que generó alianzas con The New York Times y el Chicago Tribune.

Elon Musk era el director ejecutivo de Zip2. La empresa gestionaba el desarrollo, alojamiento y mantenimiento de sitios web específicos para empresas de medios de comunicación. Esto les permitía establecer una presencia en la web a través de la edición automática añadiendo mapas e indicaciones de ruta para ir de puerta a puerta a las direcciones (un negocio que anticipaba lo que sería Google Maps combinado con Yelp).​ Para ello consiguieron el uso gratuito de la cartografía de Navteq, que había costado 300 millones de dólares. Aplicaron el lenguaje Java para enviar los mapas e indicaciones como imágenes vectoriales en lugar de mapas de bits, que eran muy lentos de transmitir en la incipiente red de internet.​ Elon se dedicó a la programación y la ingeniería, mientras que Kimbal hacía las ventas y buscaba capital.

Elon era inmigrante con una visa temporal y Kimbal era un inmigrante ilegal en Estados Unidos.​ Por la falta de recursos económicos Kimbal y Elon estuvieron un tiempo viviendo en la oficina de Zip2 y usaban las instalaciones de YMCA para ducharse.​ Solían comer muy barato en Jack in the Box. Su hermana Tosca se mudó de Toronto a San Francisco y trabajó con ellos en Zip2.

Patrimonio e hitos

En febrero de 1999 gestionaba casi 200 sitios web, incluyendo el sitio New York Today, que era un directorio local del The New York Times. Zip2 también gestionaba parte de las cadenas de Hearst Corporation, Times Mirror, Knight-Ridder y Pulitzer Publishing. Ese mismo año Zip2 fue vendida a Compaq Computer por 307 millones de dólares, ​ de los que Elon recibió 22 millones de dólares.

En marzo de 1999 Musk funda X.com, una empresa de servicios financieros y pagos vía correo electrónico que ofrecía un nivel muy alto de seguridad sin que fuese algo complicado para el usuario. Un año después se fusiona con Confinity, una empresa que permitía hacer transferencias de dinero entre dispositivos Palm Pilot usando su puerto infrarrojo y la verificación a través de una web. Siguieron usando el nombre X.com pero en febrero cambiaron su nombre legal a PayPal Inc. En sus primeras 5 semanas PayPal ya superaba los 100.000 clientes.

En 2002 eBay adquirió PayPal por 1 500 millones de dólares en acciones.​ Antes de la venta, Musk era el accionista mayoritario, con 11.7% de las acciones de PayPal. Con la venta Elon Musk ganó 150 millones de dólares en acciones de eBay. Varios miembros de PayPal fundaron sus propias compañías como YouTube, LinkedIn, Jammer y Yelp.

En junio de 2002, Musk fundó su tercera compañía, Space Exploration Technologies (SpaceX), de la cual es actualmente el director ejecutivo y director de tecnología. SpaceX se dedica a desarrollar y producir lanzaderas espaciales, con un énfasis en reducción de costos y una alta fiabilidad. Los primeros dos cohetes de transporte desarrollados por SpaceX son el Falcon 1 y el Falcon 9, y su primera cápsula es la Dragon.

En 2004 Elon Musk decidió invertir 6,3 millones de USD en Tesla Motors. No era el único inversor, pero contribuyó con el 98% de la financiación. Musk aportó casi todo el capital en las primeras dos rondas de financiamiento de Tesla y continuó invirtiendo en todas las rondas siguientes. Como resultado de la crisis financiera de 2008 y retiros forzosos en Tesla, Musk aceptó tomar el puesto de director ejecutivo.

Otra compañía en la que Musk ha invertido es Halcyon Molecular, una empresa de biotecnología fundada en 2008. Elon es miembro de la junta directiva, junto con sus compañeros fundadores de PayPal Luke Nosek y Peter Thiel. Halcyon Molecular fue fundada con la misión de curar enfermedades, extender nuestra longevidad y mejorar la calidad de vida de las personas.

Ese mismo año SpaceX firmó un contrato de 1 600 millones de dólares con la NASA por 12 vuelos de su cohete Falcon 9 y la nave Dragon a la Estación Espacial Internacional. SpaceX ha diseñado el Falcon 9/Dragon para transporte de astronautas, y la Comisión Augustine ha recomendado que el transporte de astronautas sea manejado por empresas comerciales como SpaceX.

En 2006 un primo suyo funda la empresa Solar City y Elon es el principal inversor. Es una empresa de productos fotovoltaicos y servicios. Su objetivo es extender la energía solar y hacerla lo más asequible posible. En 2011 SolarCity era la mayor empresa proveedora de sistemas de energía solar en Estados Unidos.

En 2013 presenta Hyperloop, una propuesta para construir túneles que conecten las afueras del área de Los Angeles con la zona de la Bahía de San Francisco con el objetivo de agilizar el transporte.

En 2016 funda Neuralink, una empresa de nanobiotecnología que tiene como objetivo integrar el cerebro humano con la inteligencia artificial. Se centra en la creación de dispositivos que se pueden implantar en el cerebro humano, con el propósito final de ayudar a los seres humanos a fusionarse con el software y mantener el ritmo de los avances en inteligencia artificial.

En 2019 anuncia sus planes (o deseo) de colonizar Marte. Diseñó una estrategia con la que quiere no solo aterrizar en Marte y lograr que humanos pongan un pie en él, sino colonizarlo directamente, ocuparlo. Elon Musk quiere enviar unas 1.000 naves en 2040. Y para conseguirlo pretende construir una nave a la semana, lo que implica un ritmo de producción brutal y casi sin precedentes.

SpaceX Realizó su primer lanzamiento tripulado el 30 de mayo de 2020 en el cohete Falcon 9 de manera exitosa, colocando en órbita a los astronautas Doug Hurley y Bob Behnken. También se encuentran desarrollando el BFR o StarShip, una nave que planea usar para enviar colonias de humanos en futuras misiones a Marte.

Musk fue nombrado “Persona del año” 2021 por la revista Time, un año en el que su empresa de vehículos eléctricos se convirtió en el fabricante de automóviles más valioso del mundo y su compañía de cohetes alcanzó el borde del espacio con una tripulación totalmente civil.

El rápido crecimiento del patrimonio del empresario iba acompañado por una serie de éxitos comerciales. Así, el 8 de octubre, tras una venta de sus acciones por parte de los inversores, SpaceX se convirtió en la segunda compañía privada más valiosa del mundo, con una valoración de más de 100.000 millones de dólares. El 25 de octubre, la compañía de alquiler de coches Hertz anunció la compra de 100.000 coches eléctricos de Tesla, haciendo saltar la cotización de la empresa en un 13 %. Entre tanto, en octubre la multinacional financiera Morgan Stanley predijo que el magnate podría erigirse como el primer billonario del mundo.
En Noviembre de 2021 se convierte en la primera persona cuyo patrimonio supera los 300.000 millones de dólares.

Y llegamos al año 2022 en el que el tipo se empieza a quejar por cómo funciona Twitter y en lugar de dejar de usarlo decide hacer una oferta para comprarlo.

Su visión del futuro está encaminada a la energía limpia para tener ciudades sostenibles y conquistar otros planetas con la ayuda de la tecnología para poder vivir en ellos.

Impacto

Con la llegada de los cohetes Falcon, SpaceX dió el paso de la reutilización de cohetes, que antes no era posible. Y ni hablar de la idea de que el cohete pueda volver a la Tierra luego de ser lanzado y aterrizar parado de la misma manera que despegó. Esta obra de arte de la tecnología pone sobre la mesa por primera vez la posibilidad real de vuelos orbitales a precios no tan absurdos, al menos eventualmente. Por otro lado, SpaceX también tiene el proyecto de Starlink, un servicio de internet de alta velocidad servido por miles y miles de satélites en la órbita baja de la Tierra. Si bien los viejos y confiables cables de fibra óptica que conectan el mundo actualmente ofrecen una velocidad inigualable, lo cierto es que llegar con estos cables a lugares desconectados resulta muy costoso, y es ahí donde un servicio satelital global puede hacer la diferencia haciendo, justamente, más accesible el acceso a internet. Claro que los astrónomos que se pasan la noche mirando las estrellas con sus telescopios no están tan contentos con los más de 2 mil satélites que interrumpen el paisaje, y mucho menos con los 10 mil más que tiene aprobado Musk para enviar… y ni hablar de los 30 mil que dice que quiere poner en órbita.

Como decíamos antes, Tesla es la compañía de automóviles y baterías eléctricas bajo el poder de Musk. ¿Qué impacto tiene en el mundo este tentáculo de Elon? Bueno, parece que el 15% de las emisiones de gases que contribuyen al efecto invernadero vienen del sector automotor, y Tesla tiene como objetivo reducir esos números. Si SpaceX lleva el objetivo de Musk de exploración espacial y democratización del acceso a internet, Tesla lleva el de la reducción del impacto automotor en el ecosistema. No sólo con el desarrollo de autos y motores eléctricos que puedan competir con sus primos fumadores y adictos a la nafta, sino acompañando con la innovación en baterías más sustentables, métodos de producción más limpios, energía solar más accesible y eficiente y autos con mayor vida útil (reduciendo así el desperdicio a largo plazo). Esto es hermoso en los papeles, pero parece que ya hubo algunos problemillas y protestas por el trato y la explotación de litio por parte de Tesla en varias partes del mundo. Lo cierto es que los autos de Tesla son considerados de lujo y tienen un precio muy alto, de ninguna manera accesible a nosotros los mortales, al menos por ahora.

The Boring Company quizás pasa un poco más desapercibida en relación a SpaceX y Tesla, pero su ambición no es para nada menor. En primer lugar plantean la solución de crear túneles para conectar las ciudades, tanto internamente como entre ellas. Según él, la solución al problema del tránsito es yendo del 2D al 3D, es decir habilitar los autos voladores o los autos subterráneos, y que los subterráneos son más posibles, baratos y cómodos que los otros. Otro gran proyecto de TBC es el llamado HyperLoop: un túnel que conecta dos puntos alejados, con la particularidad de que este túnel está casi al vacío, reduciendo la fricción con el aire y logrando velocidades (según dicen) de hasta 1100 km/h sin necesidad de ascender a grandes alturas como un avión. Esto hipotéticamente abarataría enormemente el costo de transporte y logística, y de paso también sería menos hostil con el medio ambiente. ¡Ah! y por supuesto esto lo acompaña con el desarrollo de maquinaria nueva para hacer túneles de manera mucho más veloz y barata que antes… claro.

Neuralink es otra de las compañías de este señor. En este caso, el objetivo de la compañía es desarrollar una interfaz entre una computadora y un cerebro, en el formato de un simpático chip del tamaño de una moneda. En principio al menos, la idea es utilizar este implante para tratar enfermedades como el Alzheimer, diabetes e incluso la depresión. Desde ya, la página web de Neuralink te propone una app (si tuvieras el chip en la cabeza y sólo en iOS) que podrías controlar con el pensamiento directamente, sin cables, sin detección del movimiento de ojos. Sólo pensando. Creo que cualquier cosa que pueda decir sobre el impacto de esta tecnología se va a quedar corto, pero definitivamente es la puerta de entrada a una revolución definitiva en cuanto a comunicaciones, educación, entendimiento del cerebro, y básicamente cualquier cosa.

Conclusión

Da la sensación de que tiene tentáculos en todos lados, o al menos en lo que más le importa, internet, energías renovables y el espacio. Busca dar un salto como especie apoyado en esos pilares y en la inteligencia artificial. Su visión del futuro está encaminada a la energía limpia para tener ciudades sostenibles y conquistar otros planetas con la ayuda de la tecnología para poder vivir en ellos.